Dicen que en la noche de Halloween no solamente los demonios caminan por la Tierra para hacer maldades sino también Drácula vuela al compás del cha cha chá; Morticia se peina con cajeta y aguarrás, la Llorona baila en los brazos de Aquamán y el Hombre Lobo aúlla sin cesar.
Pero... ¿y lxs simples mortales? Unxs salen a pedir dulce o travesura, mientras que otrxs se van con sus parejas a lugares mágicos para jugar toda la noche... ¡como si no hubiera un mañana! Porque han de saber, queridxs Meloncitxs, que Halloween es la noche perfecta para practicar distintos trucos en la cama y obtener dulces recompensas. Por eso, hoy les traemos siete diferentes posturas de Kamasutra para que saquen esos pequeños diablillos que traen por dentro. 😈
La postura del hombre lobo
Empezamos con una postura que les hará aullarle a la luna mientras la practican.
Para esto, se colocarán en el suelo en cuatro patas (sobre las manos y las rodillas). Van a experimentar la clásica postura de “El perrito” pero en modo ancestral.
La persona que se sitúe detrás de la primera tendrá la posibilidad de pellizcar ligeramente los pezones o acariciarle la vulva/el pene a su pareja. ¡Todo un recorrido que seguro los hará alucinar!
Para darle un verdadero toque de Halloween, recomendamos un espacio a la luz de la luna (o de las lámparas, en su defecto). Intenta contactar con tu lado oculto y salvaje y comunícate solo mediante gruñidos o aullidos, conviértanse en unxs verdaderos depredadores: ¡roar!🐺
Y recuerden: ¡es más liberador disfrutarlo en voz alta! Gritar el placer en modo salvaje te conectará con la naturaleza (y si lxs escuchan, los vecinos de la colonia se sentirán en medio de una manada de lobos, muy de Halloween 😉).
La elegancia de lxs gatxs negrxs
A los gatos negros se les asocia con la noche y lo prohibido y son considerados como los mejores amigos de las brujas desde tiempos inmemoriales. ¡Incluso se creía que podían transformarse en personas, a voluntad!
Lo cierto es que el mundo felino tiene la capacidad de hechizarnos por sus movimientos sinuosos y elegantes, una elegancia muy peligrosa y unos ojos misteriosos profundamente seductores…
Jueguen a imitarlxs, conózcanse en modo gatuno.
Establezcan contacto visual. Cual seductores gatitxs, con mirada intensa, muévanse sensualmente en círculos, dejando que tu vista y la vista de tu pareja se recreen. Mantengan la distancia sin prisa, tocándose con ligeros zarpazos.
Llegado el momento, una de las dos personas “se dará por vencida”, se acostará bocarriba, y dejará que su pareja comience a lamerle suavemente el cuerpo, hasta donde les permita la imaginación. Con tranquilidad felina se puede ayudar con los dedos, que acariciarán y jugarán por la zona. ¡Seguro que ronronearán de placer!
El secreto de Tutankamón
En el antiguo Egipto conservaban los cuerpos envueltos, preparándolos para una segunda vida.
Ahora despertaremos a la “momia”, para que nos revele el secreto del placer. 😉
Para esto, usarán el kit Sao para inmovilizar a su Tutankamón particular. Ya no hay excusas para que no les revele sus secretos, tendrán toda la noche para que "suelte la sopa”.
En este juego inmovilizarán a su compi de juegos y dejarán que su cuerpo roce el de la momia hasta que llegue al límite del deseo.
¿Dejaremos que se desate y camine por el mundo de lxs vivxs? Quizá, pero después de un rato muy, muy largo… que se le hará una eternidad de placer 😊
Déjame entrar
Ya están aquí esas personas que no pueden entrar a tu casa sino las has invitado a pasar antes... Esas que te hechizan con su mirada sanguinolenta mientras buscan desesperadamente comerte el cuello. Y siempre, siempre, escaparán antes de que llegue el alba. Sí, son ellxs… ¡lxs vampirxs! Y aunque no cuentan con poderes maléficos y elegancia innata, sí tienen cierta urgencia de saciar su sed de placer y esto los hace disfrutar de pie, en cualquier lugar…
Te proponemos esta postura en la que una de las personas muerde los senos y el cuello mientras usa los brazos para atraer las caderas de su compi hacia sí. La otra persona cruza la pierna para abrazar la cintura de su pareja de la noche, no vaya a ser que desaparezca...
Si se cuenta con buen equilibro y fuerza descomunal, se puede hacer sin ningún tipo de apoyo extra. En caso de que lo realicen personas ligeramente vampirizadas, sin fuerza sobrehumana, es mejor apoyarse contra una pared para que el rito de placer no acabe en caída.
Embrujando
Ninguna bruja clásica que se precie saldría de casa sin su escoba para volar. Como aún no se fabrican este tipo de artilugios, les proponemos viajar sin moverse del sitio.
Aprovéchate de tu brujería y acuesta a tu pareja sobre la cama, de forma que sus piernas sobresalgan y se apoyen sobre un banquito. Súbete encima y controla el viaje con los pies en el suelo, moviendo las caderas como lo vayas sintiendo, deseando… ¡Es hora de emprender el vuelo!
Frankenstein, el poder de la laca
Cuando hablamos de monstruos, siempre nos viene a la mente la palabra Frankenstein… ¡Es hora de vivir nuestra propia noche monstruosa, pero llena de placer!
Solo necesitamos pelo largo (o una peluca) y un bote de pintura temporal blanco para cabello: te pintarás algunos cabellos a modo de mechas blancas subiendo por las sienes. El vestido original en La novia de Frankenstein era blanco y con mangas largas. Pero podemos improvisar algo muy sexy 😏.
Ahora, jueguen a ser monstruosamente serixs. Muévanse con un toque robótico y hablen como crean que Frankenstein lo haría. Les aseguramos que les costará aguantar la risa.
El misionero del más allá
“El misionero” ya tiene un toque fantasmal de invisibilidad… Al ser una postura común, es la menos valorada de la historia, ¡a pesar de presentar muchas ventajas! Permite verse el rostro, besarse, abrazarse… Ofrece un buen control sobre las caderas y el ritmo de penetración, por lo que, si hay sincronía con tu pareja, se puede estimular deliciosamente la Zona G y/o el punto P.
En esta ocasión daremos un pequeño giro a la postura clásica por excelencia para disfrutarla de otro modo. En la penumbra, jueguen a ocultarse bajo las sábanas. Sean fantasmas que se deslizan por la piel de su compi, poco a poco creando expectativa, susurrándose algo al oído hasta llegar a lo más profundo de sus almas.
¡Buu! Déjense llevar por la sensación de estar con un ente desconocido. ¿Esa sensación de escalofrío es miedo o quizá sea otra cosa? 😉
Y ustedes, ¿cuál de estas posiciones practicarán? ¿Por cuál de ellas creen obtener más dulces gemidos? Con cualquiera que elijan les deseamos una noche mágica y llena de traviesos juegos.