Has pasado de planear un viaje a los fiordos noruegos a conocer los encantos de las casas rurales y los mojitos caseros. La nueva normalidad nos ha dejado limitaciones, dudas y un mapa menos extenso.
Los viajes se planifican a sitios más cercanos, algunos tan próximos que no solo no necesitamos un avión, sino que podemos acudir andando. Tomar un spritz en la terraza de un bar de toda la vida es el nuevo viaje exótico.
A ellxs no les ha sentado del todo mal cambiar alas por ruedas...
¿Te apetece viajar más lejos? ¡A nosotrxs también! Nos gustaría, pero no siempre es posible, así que te vamos a hacer de guías en un singular viaje por diferentes culturas eróticas que te dejarán los ojos como platos. Te transportarás sin despegarte de la pantalla.
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Es posible que no sea lo mismo que vivirlo en directo, pero no nos negarás que resulta mucho más económico… ¡Por el módico precio de 0 € no solo viajarás a miles de kilómetros, sino también a cientos de años de distancia! Ya sabes, si Mahoma no va a la montaña…
Te regalamos un pasaporte hacia otras culturas por tiempo ilimitado. ¡Lo que dure tu imaginación! Próxima parada: ¡PLACER!
Grecia
La cuna de la civilización es también el origen de muchas palabras, y una de las más fascinantes pertenece a uno de nuestros órganos favoritos: El CLÍTORIS.
Durante muchos años ha sido el gran desconocido. Para empezar no tenía ni nombre, y lo de “Lo que no se nombra no existe” te suena, ¿verdad? Venimos de una cultura donde el sexo y, sobre todo, el placer femenino han sido grandes tabúes. ¿Para qué iban a ponerle nombre?
¡Está claro que no sabían la diversión que se estaban perdiendo! 😎
De Grecia nos ha quedado el término “griego” para referirnos al sexo anal. Se trata de una práctica muy asociada con la Grecia clásica, pero… piensa que, de hecho, el sexo anal llegó a estar prohibido. Lo más habitual era rozar el pene entre los muslos hasta conseguir eyacular.
Otra de las muchas palabras de origen heleno que usamos es “lesbiana”, y su historia está muy vinculada con la literatura. En la isla de Lesbos, se producían encuentros con una famosa poetisa, Safo. Era conocida por mostrar su amor y admiración por personas con vulva. Cuenta la leyenda que las reuniones líricas con sus discípulas terminaban en relaciones muy carnales.
Dicen que el roce hace el cariño... 🤫
De la Grecia antigua hemos aprendido mucho, ¿no te parece? 😉
Italia
Es bien conocido que el Imperio romano (la antigua Italia) prosperó durante siglos porque lo mejoraban casi todo. Fueron el Japón tecnológico de la antigüedad. Contaban con grandes profesionales de la ingeniería, con una mente práctica que tomaba lo mejor y lo reconvertía para su uso y disfrute.
Bueno, Julio César, pero tampoco te flipes...
Tomaron como propia la cultura griega, cambiaron de nombre a los dioses y los festejaron a tope. Además de puentes, acueductos y caminos empedrados, hicieron del sexo en grupo un arte. Adoptaron el nombre orgía (o bacanal) para las fiestas en honor a Baco, readaptando la tradición griega de homenajear a Dioniso con una fiesta de fertilidad.
La mezcla de todos puede crear algo delicioso y placentero 😏
Las primeras orgías romanas estaban reservadas exclusivamente para personas con vulva, aunque con los años se empezaron a incluir a personas con pene. Los objetivos de las orgías eran dos:
1 – Sexo a discreción. ¡FIESTA!
2 – Homenajear a Baco/Dioniso con una ceremonia de fertilidad.
Hoy se sigue practicando por uno de los dos motivos anteriores, si eliminas al número dos.
En el siglo XVIII se recuperó la moda de organizar fiestas con vestimentas como en la antigua Roma; pero fueron las fraternidades universitarias las que rescataron a finales del siglo XX las “fiestas toga” y el tono de bacanal. ¿Te suena?
Seguro que has oído hablar de ellas... 😉
¿Crees que hubo una cultura aún más atrevida? ¡Sí! Abróchate el cinturón: nos trasladamos a más de 6.000 kilómetros en medio segundo.
India
Parece mentira que la India, donde nació el Kamasutra, también sea el lugar donde la homosexualidad estuvo prohibida hasta el 2018.
Y, aunque hemos mejorado, a día de hoy hay que seguir luchando para su aceptación total 💪🏻
Antes de nada (y esto puede resultar sorprendente): el Kamasutra no es un libro sobre sexualidad o al menos no trata solo sobre este tema.
Se compone de siete libros, y solo en el segundo se habla explícitamente sobre sexo. Esta parte es la que nosotrxs conocemos como el clásico Kamasutra: una guía con diferentes posturas y técnicas para mejorar el sexo.
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Lo importante de dicha “guía” es que se escribió con el simple objeto de obtener placer. Además, narraban técnicas muy avanzadas para la época ¡y se tenía en cuenta el placer de las personas con vulva!
Egipto
Imagina al presidente del gobierno que más te guste iniciando su mandato a las orillas de un río, masturbándose para que la cosa vaya bien. ¿Te parece raro? Pues en el antiguo Egipto no solo era normal, sino que era necesario.
Una vez al año, el faraón celebraba un ritual en honor al dios Atum en el que eyaculaba sobre el río. Se consideraba que este dios era el origen de todo; y el semen del faraón, yendo río abajo como un renacuajo, representaba este poder.
Hoy en día solucionamos este tema con un discurso y posar para la foto 😅
Egipto nos dejó, además de esta escena tan curiosa, protopreservativos hechos de papiro y un primer fanzine erótico-humorístico en el que aparecían diferentes personas disfrutando del sexo mientras tocaban música. Y estamos hablando del año 1.500 a.C., cuando el Kamasutra no era ni un proyecto.
De Egipto nos ha quedado, sobre todo, el mito de Cleopatra. Se decía que era una experta amante y que se bañaba en leche para mantener su piel impecable. Cuentan muchas leyendas, casi todas falsas, que en una época en la que reinaban los hombres ella era una mujer con poder, estudios, solvencia y dominio de varios idiomas.
Cleopatra era la influencer de la época 🤭💅
Lo cierto es que tenía una personalidad arrolladora; y posiblemente fuera cierta la historia de que, como buena persona abierta de mente, sabía disfrutar del sexo. ¡Hasta existe la leyenda urbana de que inventó el vibrador ayudándose de unas avispas!
Francia
Aunque ahora nos parezca algo maravilloso, y Francia evoque amor, romanticismo, absenta y Moulin Rouge; el adjetivo “francés” se usaba en el pasado como algo muy picante y/o prohibido. Cuando una acción sobrepasaba la raya… era un asunto “francés”.
De ahí que un fantástico beso con lengua, algo que hacía enloquecer al mundo estadounidense, se llamase “beso francés” o “hacer un francés” siga siendo un sinónimo para hablar del sexo oral. A la práctica de algo que se consideraba excitante y extraño se le otorgaba otra nacionalidad, por vergüenza.
Los besos entienden de otras lenguas 😏
Durante años la frontera con Francia era el límite entre lo conservador y lo excitante. Todavía hay gente española que recuerda los viajes al país vecino para poder ver películas con algo de sexo, como El último tango en París.
Por si te queda la duda: el beso francés en Francia se llama… “beso” 😊
¿Aún tienes ganas de viajar? Vayámonos muy lejos… pero al presente más actual.
Japón
El hentai (manga y anime japonés de contenido erótico) hace tiempo que traspasó las fronteras de Japón. De hecho, es uno de los términos más buscados en Internet y nos ha influido incluso en la estética de los juegos de roles. ¿Aún no te has disfrazado estilo hentai? Puede ser muy excitante. 😉
Para muchos, el hentai es...
El hentai viene de los antiguos “shunga”, ilustraciones muy explícitas que mostraban diferentes prácticas sexuales y que dejaron de ser populares cuando se prohibieron en el siglo XX. ¡Y es que las libertades, como vimos en la India, a veces retroceden!
La relación del país del sol naciente con lo erótico es muy estrecha y paradójica. Es un país de contrastes y choques culturales donde las relaciones pueden llegar a ser muy complejas.
Por ejemplo, se puede ver a personas trajeadas contemplando manga de alto contenido erótico como quien se echa a dormir después de comer. Nadie se escandaliza. ¡Viven y dejan vivir!
Es su equivalente a una nana 😴
Y esto no es todo. Toda la modernidad nipona se combina con viejas tradiciones como el Festival del pene de acero, Kanamara Matsuri en japonés.
En el sur de Tokio la primera semana de abril mucha gente extranjera asiste sorprendida a un desfile de penes de diferentes colores y tamaños. La mayoría se quedan con los ojos como platos al ver gente muy mayor, jóvenes, padres, madres y peques celebrando una antigua ceremonia religiosa sintoísta donde todo el mundo se divierte contemplando las “carrozas”, mientras disfrutan de piruletas en forma de falo.
...
¿Te ha gustado el paseo? En un pestañeo regresamos a tu pantalla. A veces, para viajar muy lejos solo hay que dejarse acompañar y poner un poco de imaginación.
Si has disfrutado de este artículo… ¡prometemos traeros nuevos tours turísticos sin salir de casa! 😉