¿Crees que podrás superarlo?

Hoy tenemos el espíritu juguetón y queremos proponerte un juego. No en plan Saw, sino algo más llevadero y divertido. Algo relacionado con una de nuestras cosas favoritas, que siempre reivindicamos y que siempre defendemos a capa y espada: los preliminares. Pero no los preliminares en general, sino una práctica en particular: el sexo oral. En concreto hoy, será el sexo oral a penes.

¡Ojo! Aunque no nos guste llamarlos así, puesto que no hay nada "preliminar" en el sexo, utilizaremos este término ya que la mayoría de búsquedas en la red apuntan a "preliminares". Aún así, ¡Lo que verdaderamente importa es que disfrutes y te dejes llevar por las sensaciones!

 

 

Ya en su día le dedicamos un post al sexo oral en el que dábamos todos los truquitos necesarios para convertirse en especialistas de dicho arte milenario. Te recomendamos que empieces empollándote ese post al más puro estilo examen de Historia en la ESO, y luego ya pasamos a EL RETO.

 

¿Qué necesitaremos para el reto?

 

¿Y cómo lo hacemos?

Llama a tu compi de juegos y dile que venga a casa. Dile que le vas a hacer algo que no va a olvidar en su vida, para ir subiendo la temperatura y hacer que se dé más brío en llegar.

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Cuando llegue a tu casa, abre la puerta con tu conjunto de lencería más sexy, coge su mano y lléval@ al sofá o a la cama. Lo que más te apetezca. Ahí es cuando enciendes la música, su grupo favorito, o una de nuestras playlists de Spotify, especialmente creadas para momentos como este. Pídele que se quite la ropa. Bueno, ordénaselo, que seguro que le encanta; y, cuando esté sin nada, coge las cuerdas y ata sus muñecas detrás de su espalda.

Notarás que empieza a emocionarse. Parece que la cosa promete. Es en este momento de emoción cuando tendrás que vendarle los ojos, privándol@ de su sentido de la vista. Obviamente, la emoción se convertirá en excitación. Ahora, conecta los auriculares al equipo de música y pónselos, para asegurarte de que no oiga nada de lo que está a su alrededor. Ya lo habrás privado de los sentidos de la vista y el oído; y de la posibilidad de tocarte...

Aplica el labial Divine Oral Pleasure de Shunga sobre tus labios. Rápidamente notarás cómo la temperatura de tus labios sube y baja. Sin que se entere de qué estás haciendo en esos momentos, acércate despacito y empieza a besar su cuello. ¿Lo mejor? Lo que tú sientas en tus labios lo sentirá tu pareja por donde vayas besando.

 

Continúa bajando por su cuerpo lentamente, sin que pueda verte venir. Hasta que llegues a LO IMPORTANTE.

 

 

Una vez ahí, empieza a jugar con la punta, mientras masajeas el resto de su pene con la mano. De este modo, no te cansarás y podrás mantener el ritmo durante más tiempo sin cansarte.

Y es también ahora cuando entra en juego esa bebida refrescante con burbujas, dale un traguito y mantén un poquito en tu boca. Las burbujas le darán una sensación de frescor y un cosquilleo superplacentero que hará que enloquezca.

Como te dijimos en nuestro post "No sabes nada sobre sexo oral", es importante no olvidar los testículos de tu pareja durante el sexo oral. Aquí es donde entra en juego la bala vibradora Neo, de Platanomelón. Una bala de 7 velocidades de tacto supersuave. No olvides que los testículos son una parte muy sensible, así que empieza con la intensidad más baja.

Cuando notes que no puede más, quítale la venda y desata sus muñecas. Verte en plena acción le dará aún más placer; y seguro que no podrá evitar agarrarte y hacerte el amor con más pasión y ganas que nunca.