Se acerca San Valentín y claro, tenemos dos opciones: podemos estar en pareja o podemos estar solter@s. Si te encuentras en el primer grupo, todo genial; ya habrás visto mil anuncios de perfumes, bombones, escapadas de fin de semana, cenas románticas, spas para dos y mil millones de cosas más.

PERO...

Si perteneces al segundo grupo, es posible que, con el paso de los años, hayas ido cogiendo cierta manía al día de San Valentín. Manía que ha ido creciendo cuan bola de nieve durante un alud.

Es por eso que, con este post, queremos dar planes a todo el mundo, sin importar vuestro estado sentimental. ¿Por qué? Bueno, no queremos ponernos demasiado sentimentales, pero:

Y además porque nuestras recomendaciones, hechas con todo el cariño del mundo, no harán más que llenarte de amor.

 

Para solter@s

 

Este año San Valentín cae en domingo, lo cual podría ser un auténtico motivo de tristeza profunda y ganas de no hacer nada. Pero no. Nada de autocompasión. Hay alternativas.

Juega con tu mascota favorita

Siempre hemos oído eso de que el mejor amigo del hombre es el perro, pero el de las mujeres y personas con vagina es, sin duda, el conejito. Y si no, a ver, ¿quién te alegra cuando has tenido un día durísimo en el trabajo? ¿O cuando ves una peli de Ryan Gosling y recuerdas que está casado y al otro lado del Océano Atlántico? Exacto, tu Apollo, o tu Liebe Rabbit, o tu Ina Wave. Siempre fieles y al pie del cañón.

 

Organiza una Singles Night

Lo hizo Taylor Swift con su squad, y ahora está de moda. Llama a tus colegas y prepara una cena –y quien dice cena dice banquete –en casa. Buen vino, humus con crudités, tsatsiki y, por qué no, una sesión muy didáctica con una de nuestras maestras jugueteras.

 

 

Y así, si alguna vez os dicen que un vibrador sirve para quitar las bolsas, no colará.

 

Para la gente en pareja

 

Puede que San Valentín sea en pleno invierno, pero con estas sugerencias, créenos, no pasaréis ni una gota de frío.

 

Empezad a jugar antes de llegar a la cama

¿Qué os decimos siempre? Efectivamente, que los preliminares son fundamentales. Que no os los saltéis jamás, a no ser que estéis en pleno momento de pasión desenfrenada y hagáis un mítico quickie (el rapidín de toda la vida) que tanto mola también.

Pero en San Valentín no hay quickies que valgan. En San Valentín las ganas comienzan cuando empiezas a arreglarte y continúan hasta que te quitas (o te quitan) la ropa. Si quieres que la anticipación y la espera sean más difíciles y deliciosas que nunca, te recomendamos que utilices un vibrador con control remoto. Cédele el control a tu pareja y deja que sea esta quien decida cuándo tiemblas. Durante vuestra cena romántica, mientras tomáis un cóctel, en el taxi de vuelta a casa...

Y si quieres darle un extra de placer al sexo (que eso siempre se quiere), el vibrador Doble US es un must ya que, no solo tiene control remoto, sino que también puede ser utilizado DURANTE la penetración. Francamente, se nos ocurren pocas maneras mejores de terminar San Valentín.

 

Pasa una noche perfecta sin salir de casa

Una breve reflexión para la gente más casera: si ya sabes que la cita terminará en tu casa, ¿para qué salir de ella? Empecemos con lo básico: la comida.

Como creemos firmemente que cocinar puede ser divertidísimo, te proponemos que lo hagas en pareja. Empieza la velada con unas buenas risas viendo cómo tu querida pareja corta las verduras a lo Freddy Krueger o fríe la carne tapándose la cara como si fuera a saltar una llamarada en cualquier momento.

 

 

Si no sabes qué cocinar, te sugerimos que utilices ingredientes afrodisíacos como el apio, el aguacate, las nueces; especias, como la pimienta, el perejil o el romero; y atención, el chocolate (está prohibido saltarse el postre). 

Eso sí, te recomendamos que evites alimentos que puedan dejar mal aliento como el ajo o la cebolla (no es cómodo para nadie hablar tapándose la boca para evitar que su pareja se desmaye). Y por supuesto, di no a una cena copiosa, porque ya sabemos lo que pasa cuando se cena demasiado: después solo queremos dormir.

Ahora toca el atuendo. Siempre nos han dicho que lo bonito está en el interior. Y es verdad, sobre todo si conoces la colección Magnifique de Bijoux Indiscrets. Joyas pensadas para vestir sobre la piel, como complemento de la ropa interior, o bajo prendas con transparencias que harán que tu pareja no pueda parar de pensar en lo que le espera.

Y por supuesto, crea la atmósfera perfecta. Velas, pétalos de rosa, un perfume que haga enloquecer a tu compi, música de ambiente... En definitiva, lo que haga falta para que el camino hacia vuestra noche de pasión sea tan inolvidable como la meta.

 

...

 

Así que, ya no hay excusa, este San Valentín tiene pinta de que va a ser, sin lugar a dudas, el más picante de todos... hasta ahora ;)